Una historia, un olvido... el discurrir invisible de lo que existió y se desconoce

Este espacio pretende entender la historia como una disciplina que proporciona, tanto la información como los instrumentos necesarios para conocer el pasado, pero también como una herramienta para comprender al "otro", a nosotros mismos y a la sociedad del presente en la que interactuamos.

Conocer la historia de los gitanos españoles es esencial para eliminar su invisibilidad, entender su situación en la sociedad y derribar los estereotipos acuñados durante siglos.

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martes, 1 de marzo de 2016

DOCUMENTO DEL MES. Dos procuradores en Cortes proponen el "exterminio" biológico de los gitanos (19 de marzo de 1594)

Don Jerónimo de Salamanca y don Martín de Porras, dijeron: que en estos reinos anda un género de gente que se nombran gitanos, cuya vida y trato es la más perdida que hay en toda la república cristiana, ni aun bárbara, que parece que son gente sin ley, porque no saben que guarden ninguna, sino que del todo viven llenos de vicios sin ningún género de recato, con gran escándalo de estos reinos y de los naturales de ellos.
Son gente vagabunda, sin que jamás se halle ninguno que trabaje ni tenga oficio con que sustentarse; son públicamente ladrones, embaucadores, echando juicios por las manos, haciendo entender a la gente ignorante que por allí alcanzan y entienden lo que ha de suceder. Son gente que no guarda en los matrimonios la forma de la iglesia, porque se casan parientes con parientes sin ninguna dispensación, y aun sin matrimonio se mezclan unos con otros sin tener en cuenta con deudo de parentesco, ni afinidad, ni las demás prohibiciones del derecho, y jamás se verá ninguno confesar ni recibir el Santísimo Sacramento, ni oír misa ni conocer parroquia ni cura, y plegue a Dios que el consentir pecados tan públicos no sea causa de parte de nuestros castigos.
Representantes en Cortes
Siendo cosa tan necesaria poner remedio en un daño tan grande, y que tan ordinario, es en estos reinos, convendría mucho disipar y deshacer de raíz este nombre de gitanos y que no haya memoria de este género de gente. Y el remedio que para esto parece se podría poner, es que se aparten los hombres de las mujeres, y que los uno se pusiesen en una provincia muy apartada de la otra donde se pusiesen las mujeres y se les quitase el hábito y el lenguaje de gitanos, poniéndoles graves penas si saliesen de los lugares que se les señalasen, porque de esta manera se casarían con labradores que viviesen con la orden y regla, con que los demás que están en servicio de Dios, viven.
Que las justicias tuviesen mucho cuidado de hacer trabajar a los hombres, y a las mujeres que sirvan o trabajen. Que a todos se les quitasen los hijos e hijas, y los de diez años abajo se pusiesen en la casa de los niños de la doctrina, donde los doctrinasen y enseñasen a ser cristianos, y de allí, teniendo más edad, se pusiesen los varones a aprender oficios y las mujeres a servir. Que por ningún caso se les permitiese casar unos con otros, pues para este efecto se han de apartar los hombres de las mujeres hasta que del todo se perdiese la memoria y nombre de gitanos, de manera que con graves penas se les prohibiese en todos estos reinos que ninguno se llamase gitano; y si otros remedios se hallasen más eficaces, se usase de ellos, pues el fin es que se consuma la memoria y trato de gente tan perniciosa a la república cristiana.

Pedimos y suplicamos al Reino trate de ello y acuerde lo que más convenga al servicio de nuestro Señor y el bien de estos reinos. Y vista la dicha proposición, se acordó que se llamase a los caballeros que hoy faltan para el martes primero, para tratar sobre lo en ella contenido.
19 de marzo de 1594

COMENTARIO: a lo largo de todo el siglo XVI, las Cortes se convirtieron en receptáculo de todo tipo propuestas para “sujetar” a los gitanos. En junio de 1592 se estableció la creación de un juez para resolver las causas que se abrieran contra ellos; y, ya en marzo de 1594, los procuradores protagonistas de este documento emplearon en su argumentación, casi todos los prejuicios que posteriormente conformaron el estereotipo negativo de los gitanos.
Esta propuesta de “exterminio” biológico, combinado con la aculturación de los niños y niñas gitanos resultó una novedad dentro de las propuestas antigitanas, pues hasta este momento, la política represiva se había basado en el intento de fijarlos a un domicilio conocido bajo un estricto control de sus personas y caballerías.
Asociados a un problema de orden público, en el que paralelamente se hallaba la cuestión morisca, la solución de la expulsión comenzó a cobrar fuerza; sin embargo, en este debate se coló la idea de “exterminio”, que desechada entonces por las Cortes, quedó latente en el tiempo, hasta que finalmente tomó cuerpo dos siglos y medio más tarde con el proyecto iniciado con la redada de 1749, cuyo punto final no llegó hasta el indulto real de 1765.

PARA AMPLIAR VER: http://revistadehistoria.es/los-antecedentes-al-proyecto-exterminio-gitano-1749/?utm_source=MadMimi&utm_medium=email&utm_content=Los+antecedentes+al+proyecto+de+%E2%80%9Cexterminio%E2%80%9D+gitano+de+1749&utm_campaign=20160428_m131104552_Los+antecedentes+al+proyecto+de+%E2%80%9Cexterminio%E2%80%9D+gitano+de+1749&utm_term=Continuar+leyendo___